" Me refiero a continuación al artículo Born gay? The psychobiology of human sexual orientation, de Qazi Rahman y Glenn D.Wilson, publicado en Personality and Individual Differences, número 34 (2003), pags. 1337–1382. No se trata de un artículo de investigación en el que los autores proponen nuevas ideas, sino de una recopilación de trabajos científicos anteriores, en la que se citan 264 referencias.
Los temas en los que me voy a centrar son los siguientes: genética y niveles hormonales en el útero materno, por lo que se refiere a las causas de la homosexualidad, y manifestación de caracteres secundarios, es decir, características típicas que manifiestan los homosexuales y que los diferencian de los heterosexuales.
1.- Genética. Existen evidencias que vinculan el desarrollo de la homosexualidad en la edad adulta con el genotipo. La más importante consiste en que un individuo homosexual tiene mayor probabilidad de tener familiares homosexuales que un individuo heterosexual. Las correlaciones más intensas se dan entre hermanos: dado un individuo homosexual, la probabilidad de que su hermano también lo sea es razonablemente alta; en parejas de mellizos, tal probabilidad se incrementa; y en parejas de gemelos, la misma probabilidad es aún mayor. Esto es compatible con una importante correlación entre homosexualidad y genes, pues los individuos más vinculados genéticamente (los gemelos) están también más vinculados en su sexualidad. Al mismo tiempo, estos resultados indican que el origen de la homosexualidad no puede ser totalmente genético, ya que en tal caso la coincidencia entre hermanos gemelos debería ser del 100%.
Estudios detallados indican una conexión entre la homosexualidad masculina y el cromosoma X; para la femenina, las conclusiones no están tan claras. En particular, muchos trabajos identifican el gen Xq-28 como responsable, en parte, de la homosexualidad masculina.
La relación entre genética y homosexualidad es complicada de entender desde un punto de vista evolutivo, pues no queda claro cómo los homosexuales, que se reproducen en menor grado que los heterosexuales, pueden perpetuar sus genes. Hoy en día existen varias explicaciones al respecto.
Una teoría bastante aceptada establece que la homosexualidad está relacionada con un conjunto de genes. Para que ésta se manifieste es necesario que el individuo posea los dos pares de alelos que la producen; cuando sólo posee uno de ellos, el individuo resulta heterosexual, pero puede transmitir la homosexualidad a su descendencia. La ventaja evolutiva de los genes de la homosexualidad, que les permite sobrevivir en condiciones, en principio, adversas, consisten en que los individuos con un solo alelo manifiestan características que les son beneficiosas, como la sensibilidad y la empatía en hombres, y la competitividad en mujeres.
Otra teoría que permite entender por qué la componente genética de la homosexualidad no ha sido erradicada por la evolución indica que ésta favorece las alianzas masculinas, lo cual conlleva importantes beneficios. Esta teoría se basa principalmente en el estudio de la homosexualidad en primates.
2.- Hormonas. Una de las teorías más aceptadas sobre el origen de la homosexualidad, la conocida como "teoría androgénica", establece un vínculo entre la orientación sexual del individuo adulto y el nivel de exposición a determinadas hormonas en el útero materno. Según ésta, la ausencia parcial de andrógenos durante el embarazo tiene como consecuencia una feminización cerebro del feto, lo cual puede conllevar el desarrollo de homosexualidad masculina en la edad adulta. De igual modo, un exceso de andrógenos conlleva una masculinización cerebro del feto, lo que favorece el desarrollo de homosexualidad femenina.
En una línea similar, la teoría conocida como "inmunización maternal" establece que la acumulación de anticuerpos H-Y en el útero materno tiene como consecuencia una feminización del cerebro del feto, con la consecuente tendencia a la homosexualidad masculina. Estos anticuerpos se van acumulando en sucesivos embarazos, lo cual conlleva que la probabilidad de que un hombre resulte homosexual es mayor si éste posee muchos hermanos mayores, tal y como se ha observado en ciertos estudios.
3.- Caracteres secundarios. Existen algunos caracteres que están correlacionados positivamente con la homosexualidad, esto es, que son más frecuentes en individuos homosexuales que en heterosexuales. Esta correlación es meramente estadística: el hecho de que una persona manifieste uno de estos caracteres no quiere decir que sea homosexual. Algunos de ellos son los siguientes: razón entre la longitud de los dedos segundo y cuarto, mayor tamaño de los genitales (en hombres), pubertad más temprana, menor tamaño del cuerpo (en hombres), mayor proporción de zurdos, etc.
Asimismo, también se han encontrado diferencias neuropsicológicas entre homosexuales y heterosexuales. Por ejemplo, ciertos estudios muestran que los hombres homosexuales son menos hábiles para realizar mentalmente rotaciones de objetos tridimensionales que los hombres heterosexuales, y, al contrario, que manifiestan mayor facilidad en el manejo del lenguaje. Este resultado está de acuerdo con las teorías que indican que la homosexualidad masculina está relacionada con la feminización del cerebro durante el embarazo, pues la menor habilidad para realizar mentalmente rotaciones de objetos tridimensionales y la mayor capacidad en el manejo del lenguaje son también características propias de las mujeres heterosexuales.
En conclusión, la homosexualidad parece estar causada por una coincidencia de varios factores, entre los que destacan los hormonales y los genéticos. Por el contrario, existe poca evidencia científica de que la influencia del entorno sea importante. "